En este caso los insectos y las pestes son más frecuentes en cultivos exteriores que en cultivos indoor. En cultivo de interiores el único secreto es mantener hermético el hábitat de las plantas y con una buena circulación de aire. No debería ingresar ninguna clase de insecto mientras hagamos las cosas como corresponde.



Siempre mantener cerrada la entrada al hábitat, abrirla solo para entrar o salir. Mantener el piso perfectamente limpio sin restos de hojas o tierra, siempre barrer y trapear con desinfectante. Mantener permanente ventilación renovando el aire, de esta manera no damos lugar a la formación de hongos. Si realizamos estas tres cosas no deberíamos tener ningún problema con nuestro cultivo, de todas maneras nadie esta exento a que ocurra.



En exteriores el escenario es totalmente distinto. El clima es administrado por nuestra caprichosa Madre Tierra, el viento mueve las plantas haciéndolas más fuertes y espantando a todo bicho volador que se les acerque, la lluvia baña las plantas e influye en la humedad. Los períodos de lluvia largos, sin que el sol aparezca promueve la formación de hongos y de las enfermedades que traen consigo.



Siempre que encontremos nuestro jardín invadido por insectos o pestes la respuesta es siempre la misma: FALTA DE PREVENCIÓN.



CONSEJOS PREVENTIVOS:



* Evite tener objetos como alfombras o cortinas, estas absorben humedad y promueve la formación de hongos.

* Entrar a la sala de cultivo con las manos limpias y revisar que nuestro calzado esté limpio.

* Evitar el ingreso de mascotas a la sala de cultivo.

* Una vez cortada la planta el sustrato debe desecharse, nunca reutilizar la tierra.

* Utilizar una buena lupa siempre nos ayudará a detectar a tiempo pequeños insectos u hongos antes que se propaguen.

* Un ventilador que mueva las plantas logrará mantenerlas secas y que no se acumulen hongos, sobre todo en las flores.

* Siempre que aparezcan signos de peste o insectos en una planta debemos apartarla del resto para evitar la propagación a todo el cultivo. Tratarla de desinfectar por separado.

* Si disponemos de un aire acondicionado en la sala de cultivo, lo conveniente es ponerlo a funcionar enfriando toda la sala. Los insectos no toleran las bajas temperaturas y mueren.

* Existen insecticidas naturales que se diluyen en agua para luego rociar la planta por completo.

* Siempre que rociemos la planta con un insecticida leamos siempre a base de qué está hecho, muchos son tóxicos y contaminan la planta.



Recuerde: SIEMPRE ES MEJOR PREVENIR QUE CURAR. Sobre todo cuando hablamos de este tema, las plagas se propagan muy rápido y se convierten en un dolor de cabeza echándonos a perder en un abrir y cerrar de ojos todo nuestro cultivo.